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La preocupación por las pensiones vuelve a subir. La aprobación de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2019 no está ni mucho menos garantizada por la variedad de apoyos que necesita el Gobierno, y las dificultades que se han planteado en las negociaciones entre las distintas fuerzas políticas han sembrado de dudas a los españoles. El Ejecutivo ha incluido en las cuentas públicas varias medidas para subir las pensiones, que peligran si al final no salen adelante.

Así lo confirma el último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), en el que la preocupación por las pensiones vuelve a repuntar. En concreto, ha pasado de ser mencionado como principal problema por el 7,7% de los encuestados en el mes de septiembre al 10% en octubre. Se aprecia un importante repunte no solo en comparación con los datos del mes pasado, sino también con los registrados hace un año (entonces las pensiones eran la principal preocupación para el 3,1% de los encuestados por el CIS), pero también es verdad que aún está lejos del 15,5% registrado el pasado mes de marzo, todavía con Mariano Rajoy en el poder y en pleno apogeo de las manifestaciones de los pensionistas que se produjeron en toda España.

La negociación de los PGE ya ha comenzado, pero de momento no hay avances, lo que deja la subida de las pensiones en el aire

Aunque si se analizan los datos más en detalle, el CIS revela que los españoles que tienen 65 años y más son los más preocupados por este asunto, y entre ellos, los que más los votantes del PNV. No en vano los pensionistas vascos siguen siendo los más activos en la defensa de las pensiones, y cada lunes desde hace meses salen a la calle para reivindicar unas "pensiones dignas".

Los pensionistas no se fían de que el Ejecutivo de Pedro Sánchez pueda cumplir sus promesas, sobre todo teniendo en cuenta lo complicada que se plantea la negociación de los Presupuestos. El acuerdo alcanzado entre el PSOE y Unidos Podemos no es suficiente para que las cuentas públicas salgan adelante. De hecho, también se necesita el apoyo del PNV y de los independentistas catalanes, y cada uno está poniendo sus propias condiciones sobre la mesa. Con ERC y el PDeCAT la situación pinta complicada, dado que exigen al Gobierno algún gesto con los presos del 'procés' para respaldar los PGE. El PNV también ha dicho que su apoyo no será gratuito, aunque a priori el acuerdo parece factible.

Las negociaciones ya han comenzado, pero de momento no se ha producido ningún avance. Muy significativos han sido los movimientos del líder de Podemos, Pablo Iglesias, que se ha reunido en los últimos días con el líder de ERC, Oriol Junqueras, en la cárcel, y con el lehendakari vasco, Iñigo Urkullu. La cita con Junqueras no dio sus frutos, y tras la visita a Urkullu el PNV quiso dejar claro que los PGE deben negociarse directamente con el partido, y no con el lehendakari. Además, el Gobierno ha dicho que Iglesias no es ningún 'enviado especial' para negociar los Presupuestos, y que las conversaciones las está liderando el Ministerio de Hacienda.

El Gobierno aún no ha presentado los Presupuestos en el Congreso (tiene previsto hacerlo a principios de diciembre) pero son muchas las dudas que han surgido en torno a ellos. Por ejemplo, el Ejecutivo ha aprobado en Consejo de Ministros un déficit del 1,8% para el año que viene, pero como esta senda no ha sido aprobada por las Cortes, las cuentas se basarán en la aprobada por el anterior Gobierno del PP, del 1,3%. Eso hace que sea complicado el encaje de los nuevos gastos, entre ellos los previstos en materia de pensiones.

En concreto, el Ejecutivo ha anunciado que las pensiones mínimas y no contributivas subirán un 3% en 2019, lo que tendrá un coste de 384 millones de euros, lo que impactará directamente en los Presupuestos y se pagará vía impuestos para no aumentar el agujero del sistema. Por otro lado, la revalorización de las pensiones con el IPC, que se hará con cargo a la Seguridad Social, provocará un gasto de 704 millones de euros. Esas son las cifras que aparecen en el acuerdo firmado por el Gobierno y Unidos Podemos, aunque no queda claro que sea el gasto final, porque en los PGE el incremento de las pensiones mínimas y no contributivas aparece recogido junto al gasto de la revalorización de las pensiones según el IPC, y en total el Gobierno estima que el desembolso será de 736 millones de euros.

Y la preocupación reflejado por el CIS también tiene otra explicación: el constante aumento del gasto en pensiones. Los datos de octubre se han conocido este viernes, y se ha marcado un nuevo récord tras la subida del 4,8% que ha experimentado hasta los 9.256,7 millones de euros. La factura de las pensiones crece cada vez más porque se suman nuevos pensionistas al sistema y porque muchos de ellos suelen tener pensiones más elevadas. Eso, unido al hecho de que el sistema no se sostiene por sí mismo, está provocando una merma de la 'hucha' de las pensiones que preocupa, y mucho, a los pensionistas. Tanto que han pedido a la Fiscalía que investigue el "saqueo" del Fondo de Reserva de la Seguridad Social, ya que ha pasado de los casi 67.000 millones que tenía en 2011 a los 8.000 millones actuales.

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