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Prostitutas de Barcelona protestan por el plan abolicionista del PSC

Los socialistas llevan hoy al pleno una propuesta para impulsar medidas de apoyo a las personas que ejercen la prostitución y sanciones a proxenetas y clientes

Alfonso L. Congostrina
La protesta de prostitutas que se produjo ayer en Barcelona.
La protesta de prostitutas que se produjo ayer en Barcelona. CARLES RIBAS

Un centenar de prostitutas se manifestó ayer a las puertas del Ayuntamiento de Barcelona en protesta por la proposición que lleva hoy al pleno el PSC en contra de la prostitución y la explotación sexual. Las manifestantes cortaron la Via Laietana para reclamar “derechos sociales” para las trabajadoras sexuales y para criticar la “criminalización” que, aseguraron, genera la propuesta del PSC. El grupo socialista pretende que se aprueben medidas de apoyo y asistencia integral a este colectivo y sanciones a proxenetas y clientes.

Las manifestantes, sin embargo, acusaron a los socialistas de intentar desplegar un nueva ordenanza contra la prostitución como la impulsada hace 12 años y que, a su juicio, ha causado más "inseguridad y vulnerabilidad hacia las trabajadoras sexuales". En la marcha había miembros de Aprosex, la asociación que aglutina a las prostitutas de Barcelona y Prostitutas indignadas, la entidad que representa a las trabajadoras sexuales que ejercen en la vía pública del Raval.

"Ahora estamos más organizadas que nunca y como vecinas de la ciudad queremos que se nos escuche y se nos tenga en cuenta cuando se pretende legislar sobre nuestro trabajo y, en definitiva, sobre nuestra vida", aseguró Concha Borell, presidenta de Aprosex. Las manifestantes criticaron que la prohibición "está lejos del feminismo y la igualdad".

Las mujeres que protestaron ayer en Barcelona acusaron al PSC de realizar una proposición "de cara a la galería". "Son avances de cara a las elecciones del próximo año que, al fin y al cabo, es lo único que les interesa y no las vecinas trabajadoras sexuales de Barcelona, que no les interesamos", criticaron. "Que tengan la decencia de reunirse con nosotras, mirándonos a la cara y consultándonos cuando quieran crear normativas sobre nuestras vidas", exigieron a los representantes políticos.

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