Los hermanos de BMW, el fundador de Lidl... los discretos multimillonarios alemanes

Alemania es el origen de algunas de las marcas globales más conocidas, de Siemens a Adidas, de Volkswagen a Bayer, pasando por gigantes como SAP, Deutsche Bank, Allianz, BASF y Mercedes. Con facturaciones increíbles y sólidos beneficios. Pero algunos de sus fundadores y actuales propietarios, los multimillonarios de la mayor economía europea, permanecen normalmente en un discreto segundo plano. A veces en un considerable anonimato a pesar de su posición. ¿Quienes son? Primeras pistas: la mayoría debe su riqueza al sector del motor y a las cadenas de supermercados. Y casi todos la heredaron.

En Alemania había el año pasado unos 1.370 millonarios. Un 6,6% más que en el ejercicio previo. Y disfrutaban de una riqueza total valorada en alrededor de 4,44 billones de euros, tras repuntar un 7,6 por ciento en términos interanuales. Eso estima la consultoría Capgemini en su último Informe sobre Riqueza global, un compendio de los ricos entre los ricos de todo el mundo. La revista estadounidense 'Forbes', que elabora un ya clásico listado de superricos, indicaba en su último ránking que en Alemania había 112 milmillonarios (teniendo en cuenta sus participaciones empresariales, inmuebles y deuda). Boston Consulting Group apuntaba que Alemania era el quinto país del mundo con más millonarios y el segundo de la UE, tan sólo por detrás de Reino Unido.

Los hermanos de BMW. Los Quandt son el clan más rico de Alemania, según el último Índice de multimillonarios de Bloomberg, que les estima una riqueza combinada de 36.465 millones de euros. Son los herederos de Herbert Quandt, el hombre que transformó BMW de empresa al borde de la quiebra en uno de los mayores fabricantes de coches de lujo del mundo. Sus dos hijos, Stefan Quandt y Susanne Klatten (su apellido de soltera era Quandt), son actualmente los accionistas de referencia en la compañía, además de tener participaciones clave en otras empresas como la logística alemana Logwin, la quimica Altana, la energética Nordex o la compañía de software holandesa Gemalto. Ella, con un 20,8% de las acciones del grupo BMW, acumulaba el año pasado más 17.420 millones de euros y era la tercera persona más rica de Alemania, la primera mujer de la tabla, según el tradicional listado de 'Forbes' (que la situaba en el puesto 38º a nivel global). Su hermano, mientras tanto, se situaba como el quinto alemán más acaudalado (47º del mundo), con 15.628 millones de euros. Su participación en BMW asciende al 25,6%.

La clan de los Aldi. Los hermanos Theo y Karl Albrecht convirtieron el ultramarinos que les dejaron sus padres tras la II Guerra Mundial en una cadena internacional de supermercados de descuento. Pese a la pujanza en el negocio, las desavenencias sobre la estrategia empresarial les llevaron a partir en dos su imperio: Theo se quedó con el norte de Alemania y Karl con el sur. Aún y todo no les fue mal y en la actualidad, sólo en Alemania, suman más de 10.000 filiales. 'Bloomberg' les estima una riqueza conjunta de 33.134 millones de euros. 'Forbes' sitúa a los hijos de Karl, Karl Albrecht Jr. y Beate Heister, en el primer puesto de la lista de alemanes más acaudalados (en el puesto 24º del ránking global), con 27.900 millones de euros. Theo Albrecht junior, hijo del hermano pionero homónimo, tiene una riqueza estimada de 18.300 millones de euros. Aparece como la quinta persona con más dinero de Alemania, en el puesto 45º de la clasificación mundial.

La familia Schaeffler. El sector del motor ha dado otro clan de multimillonarios en Alemania. Son los Schaeffler, al frente de uno de los grupos de empresas de partes y componentes más potentes del mundo. 'Forbes' atribuye a Georg Schaeffler, el actual patriarca de la familia e hijo del fundador, unos activos agregados de 23.900 millones de euros y lo sitúa como segundo alemán más rico. En la lista global de esta revista económica estadounidense, aparece en el puesto 31º. En la actualidad controlan el 80 por ciento del grupo que empezó fabricando cojinetes y rodamientos y ahora emplea a cerca de 91.500 personas y facturó el año pasado 14.000 millones de euros.

El hombre detrás del Lidl. Dieter Schwarz es conocido como el individuo más rico de Alemania (a diferencia de los anteriores, que tienen activos compartidos). 'Forbes' le calculó unos 17.600 millones de euros, obtenidos gracias a la cadena de supermercados de descuento que fundó en 1973 y que en la actualidad es la mayor de toda Europa. O sea, sexta persona más rica de Alemania y número 50 en la clasificación global. Pero la revista económica alemana 'Bilanz' le estimó una riqueza conjunta de unos 37.000 millones de euros en agosto de 2017. A sus 78 años, está al frente de más de 10.000 filiales y 400.000 empleados que generaron el año pasado unos ingresos totales de 96.900 millones de euros.

La familia Boehringer. Los descendientes de Albert Boehringer son el segundo clan más rico de Alemania, según estimaciones de 'Bloomberg'. A la actual generación, encabezada por Hubertus von Baumbach, yerno del fundador, se le estiman unos activos totales de unos 36.038 millones de euros. Su posición se debe a la industria farmacéutica que el patriarca puso en marcha en 1885, dedicada al desarrollo y producción de medicamentos, y que es la mayor del sector en Alemania. La compañía, en manos de la familia y con cerca de 45.700 empleados, obtuvo en 2016 unos ingresos de 15.850 millones de euros y un beneficio neto de 2.872 millones.

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Heinz Hermann Thiele. Según 'Forbes', es la séptima persona más rica de Alemania (y el 90º del mundo), con unos activos que ascienden a 11.218 millones de euros. Y el primero en esta lista que no ha heredado su imperio empresarial. Es el presidente del grupo de proveedores de componentes del sector del motor Knorr. El nombre puede no arrojar mucha luz, pero la compañía es líder mundial en sistemas de frenado para vehículos pesados y trenes. Thiele entró como licenciado en el departamento de patentes de la empresa en 1969 y en 1985 era ya su presidente y accionista mayoritario.

Los fundadores de SAP. Los impulsores de SAP, la mayor empresa europea de software, son los únicos representantes de la nueva economía en esta lista. Hasso Plattner aparece como el décimo mayor multimillonario alemán (118º del mundo), con 11.200 millones de euros, aunque ya haya abandonado la compañía para dedicarse a la docencia en la Universidad de Potsdam y a gestionar un fondo de capital riesgo que apoya a tecnológicas emergentes. Otro de los fundadores del gigante informático alemán es Klaus Tschira. Sus hijos Udo y Harald suman activos por unos 10.800 millones de euros y ocupan la posición undécima en el ránking alemán y la 123º de la tabla global confeccionada por 'Forbes'.