MADRID, 1 Oct. (EUROPA PRESS) -
El gobernador electo de Okinawa, Danny Tamaki, ha reiterado este lunes su intención de cerrar las bases militares que Estados Unidos posee en la prefectura japonesa, la principal medida con la que se presentó a los comicios regionales que ganó el domingo.
Tamaki, hijo de un marine estadounidense y una mujer japonesa, ha comparecido en rueda de prensa para ratificar que hará todo lo posible para que los gobiernos de Japón y Estados Unidos lleguen a un acuerdo para cerrar la base aérea de Futenma, según ha informado la cadena pública NHK.
Durante la campaña electoral, Tamaki prometió una firme oposición a los planes del Gobierno central para reubicar en la isla la base aérea de Futenma, manteniendo así la postura del anterior gobernador, Takeshi Onaga, que murió en agosto a causa de un cáncer.
Hace 22 años, Estados Unidos y Japón acordaron cerrar la base de Futenma, ubicada en una zona residencial, después de la violación de una niña japonesa de 12 años por parte de tres miembros del personal de la base militar americana que suscitó manifestaciones masivas.
Las autoridades de Okinawa han impugnado durante mucho tiempo un plan del Ejecutivo japonés para trasladar la base aérea al distrito de Henoko, con menos población. Sin embargo, las protestas se han sucedido por parte de los residentes, que expresan su preocupación por la polución, el ruido y el crimen.
Tamaki ha asegurado que mantendrá la postura de su antecesor en el cargo para impedir que el problema se resuelva con un mero traslado a otro distrito de Okinawa.
El gobernador electo, cabeza de una coalición electoral contraria a las bases estadounidenses, se ha impuesto en las urnas a Atsushi Sakima, que contaba con el respaldo del Gobierno del primer ministro, Shinzo Abe.
